En el año 1074, en tiempos del Cid y bajo el reinado de Alfonso VI, extramuros de la ciudad, se construyó una capilla como parte de un pequeño hospital jacobeo, a cargo de un monje benedictino, Adelelmo, luego conocido como San Lesmes, patrono de la ciudad de Burgos, que moriría en 1097. La construcción románica fue derruida en 1382 para construir el actual templo gótico muy transformado en el siglo XV. En el exterior vale la pena detenerse en su portada gótica. Frente a su grandioso retablo barroco sin policromar se encuentra el sepulcro del santo, tallado en alabastro, de finales del siglo XV.
Rev. ALC: 25.09.19