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Segorbe (Castellón)

  • Segorbe, Castellón
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Tres mil moros cabalgan y empiezan a avanzar,

llegaron por la noche a Segorbe a acampar.
Versos 643 y ss. CMC

Segorbe, como sucede en un gran número de casos de poblaciones medievales, se desarrolló alrededor de su castillo. La fortaleza tiene su origen en un antiguo poblamiento ibero, sobre el cual emplazaron los romanos un campamento, y aquí levantaron godos y musulmanes un castillo.

En el Cantar, Segorbe aparece como plaza musulmana. Tras la conquista del castillo zaragozano de Alcocer por el Cid, el rey Tamín de Valencia envió un ejército de 3.000 caballeros a las órdenes de los generales Fariz y Galve con la misión de recuperar la plaza. Este ejército, que días después sería derrotado por el Cid, acampó la primera noche en Segorbe. Aunque no existen pruebas concluyentes, el historiador Escolano (XVI) afirmó que en 1091 su castillo tributaba al Cid 6.000 dinares anuales.

En 1236 -en tiempos de Jaime I y dos años antes de la conquista de Valencia- Segorbe fue donada al obispo Guillermo por el último gobernador almohade de Valencia -Said Abu-Said Abd al-Rahman, conocido como Zayd Abu Zayd, y una vez bautizado, como Don Vicente Bellvís-. Cuando Abu Zayd fue desposeído del trono valenciano por Zayyan, halló refugió en Segorbe. Allí permaneció hasta que, en 1245, Jaime I conquistó la ciudad sin uso de la fuerza. Poco después pasaría a ser sede episcopal, que hasta entonces se hallaba en Albarracín. Esto abrió una larga disputa entre ambas localidades, que acabaría resolviéndose en 1259, al ser declaradas ambas jurisdicciones distintas.

El primer señor de Segorbe fue el infante Don Pedro, hijo del rey Sancho, quien la donaría luego a su hijo, Jaime (1279). Sería él quien, ya como Jaime II, concedería múltiples privilegios al lugar y quien, más tarde, crearía el ducado de Segorbe.

 

Qué ver y hacer en Segorbe

Segorbe, capital del Alto Palancia, es ciudad monumental y está declarada conjunto histórico artístico. El origen temporal de la localidad actual se remonta a la época islámica, y el geográfico en su castillo, situado sobre el cerro de Sopeña. De aquella época sólo quedan los restos arqueológicos, ya que la fortaleza actual, llamada de La Estrella, prácticamente desmantelada, data del siglo XIX, de la época de las guerras carlistas. Hoy el castillo se ha reconvertido en parque, desde el que se obtienen interesantes vistas del valle del Palancia y de la localidad. Precisamente desde el castillo surgían las murallas que protegían la ciudad y que hoy, parcialmente, pueden recorrerse, así como algunas torres con utilidad complementaria, como son las del Verdugo y de la Cárcel (XIV).

Monumentalmente, su edificio más emblemático es la Catedral, que es la única en la provincia de Castellón. Iniciada en el siglo XIII sobre la antigua mezquita, en su claustro se exhibe una interesante colección de pintura gótica valenciana. Igualmente gótica es la Iglesia de San Pedro. También significativo, de estilo mudéjar, es el artesonado del Salón de Plenos del Ayuntamiento (XIV), muy expresivo del buen trabajo de los artistas mudéjares.

Segorbe es también conocida por la riqueza y abundancia de sus aguas. En el siglo XIX, en lo que hoy es la Plaza del Almudín, junto al Sindicato de Regantes, se reunían los agricultores para organizar los riegos, una vieja institución consuetudinaria denominada "las mandas". Una red de fuentes y manantiales abastece la ciudad de Segorbe desde tiempos remotos. La Fuente de los Cincuenta Caños, cada uno de los cuales exhibe el nombre y escudo de una provincia española,  o su acueducto (siglo XIV), no son sino el máximo exponente de una ciudad donde el agua tiene un especial protagonismo.

 

Además, no puedes perderte...

  • La Entrada de Toros y Caballos: Segorbe celebra durante la segunda semana del mes de septiembre esta fiesta, declarada de Interés Turístico Internacional. Documentada desde el siglo XIV, en la fiesta se dan cita multitud de personas que, formando una muralla humana, son testigos del espectáculo en el que una manada de toros es arropada y guiada por una decena de diestros jinetes.
  • Probar la Olla Segorbina, típico plato de puchero valenciano que te dará fuerzas para continuar tu viaje.

 

Información práctica

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