Calatayud (Zaragoza)
Los de mío Cid en su persecución van,
el rey Fáriz en Terrer logró entrar,
pero a Galve no lo acogieron allá
hacia Calatayud a toda prisa se va.
Versos 771 y ss. CMC
Calatayud, situada en el vértice de las cuencas de los ríos Jalón y Jiloca, fue fundada por los árabes en 716, en los primeros años de la conquista, como enclave militar probablemente sobre lo que hoy son los vestigios del castillo de Doña Martina. El topónimo proviene del árabe y significa "el castillo de Ayub", nombre del gobernador de la ciudad. Los historiadores creen que entre 862 y 875, y bajo mandato del emir Muhammad I, pasó a convertirse en una fortaleza militar de primer orden dentro de la Marca Superior, con una medina y un complejo sistema de fortificaciones compuesto principalmente por un castillo (el Castillo Mayor) y tres fortalezas secundarias. Su importancia la convirtió en foco de conspiraciones, rebeliones y algunos episodios épicos muy propios del siglo X. Por aquí pasaron Abderramán I, Almanzor y el no menos legendario general Galib.
En el siglo XI la población podría oscilar entre los 5.000 y los 10.000 habitantes. La ciudad, entonces bajo dominio musulmán, contaría con baños, mezquitas, sinagogas y alguna iglesia. En 1110 los almorávides la conquistaron a los árabes yemeníes que la gobernaban y el 24 de junio de 1120 fue conquistada por Alfonso I el Batallador. La conquista era a veces más sencilla que la repoblación; prueba de ello y de que Calatayud seguía siendo diez años después una ciudad de frontera, es que en 1134 Alfonso I expidió el fuero en el que perdona de sus crímenes a aquellos homicidas que quisieran asentarse en la ciudad. Un puro western medieval.
Calatayud aparece en el Cantar de mio Cid: tras la conquista de Alcocer por Rodrigo y sus hombres, los habitantes de Calatayud piden ayuda al rey Tamín de Valencia, quien envía un ejército de 3.000 caballeros. Ambos ejércitos se enfrentan en Alcocer. La batalla se inclina del lado castellano. Uno de los dos generales musulmanes, Galve, herido en la cabeza por Martín Antolínez, consigue resguardarse en Calatayud tras ser perseguido por el Cid hasta las mismas puertas del castillo.
Qué ver y hacer en Calatayud
Calatayud es conjunto histórico-artístico. Desde luego, la primera referencia para el viajero es su arquitectura mudéjar, declarada Patrimonio de la Humanidad. Los mudéjares eran los musulmanes que se quedaron en sus tierras tras la conquista cristiana. Los mudéjares utilizaban en sus construcciones materiales económicos -yeso, ladrillo, cerámica- para crear un arte geométrico, cromático e imaginativo muy singular.
En Calatayud es Patrimonio de la Humanidad la Colegiata de Santa María La Mayor, levantada, como era costumbre, sobre la antigua mezquita mayor de la ciudad. Consta de tres naves. Del estilo mudéjar originario se conserva el claustro, el ábside y la torre octogonal, de 68 metros de altura. Del mismo estilo, no tan alta pero de igual interés, es la iglesia mudéjar de San Andrés: las dos torres sobresalen sobre los tejados de la ciudad vieja y configurando el perfil de la ciudad. Encontrarás otro ejemplo de interés de arte mudéjar en las yeserías de la iglesia de Nuestra Señora de La Peña, asentada sobre los cimientos del castillo del mismo nombre.
El casco antiguo de Calatayud resulta muy interesante, no sólo por albergar algunos templos de interés -como la iglesia gótica de San Pedro de los Francos, del siglo XIV- sino también porque aún conserva parte de esa atmósfera de ciudad de primera mitad del siglo XX, palpable en algunos comercios, casas y letreros. En ese paseo el viajero atento se sorprenderá por el número llamativo de solares y edificios derrumbados, esto debido al terreno "móvil" sobre el que se asienta la ciudad.
Por último, si quieres respirar historia, si quieres sentirte soldado omeya o aragonés, solo tienes que subir al castillo. Se trata de uno de los sistemas defensivos islámicos más importantes de toda España: su cronología es muy variada, desde el siglo IX hasta el XV, pero es predominantemente árabe. Por toda la ciudad encontrarás restos de murallas y de sus castillos de origen islámico (de Doña Martina, de la Peña y del Reloj). El mejor conservado de todos, el más emblemático es el Castillo Mayor o de Ayub, que data de los siglos X-XI. Más de mil años te contemplan. Se halla sobre el alto que domina la ciudad. Para llegar puedes atravesar la ciudad, ascendiendo por los antiguos barrios de la judería y la morería.
Muy cerca del castillo de Ayub se encuentra una de las torres emblemáticas de la ciudad: la torre Mocha. Además, como propina, los yesos del paisaje, en la distancia y dependiendo de la hora y de la estación, ofrecen al viajero una perspectiva paisajística casi lunar.
No te puedes irte de Calatayud sin probar sus estupendos garbanzos con congrio o los fardeles: son platos típicos y diferentes, bien preparados, con buenas materias primas; vale la pena probarlos. El plato de carne por excelencia es el ternasco asado, todo ello "regado" con vino denominación de origen Calatayud. Aunque los vinos de Calatayud tenían fama de "duros", la cosa ha cambiado mucho desde hace unos años: merece la pena indagar en sus bodegas, quizá te lleves alguna sorpresa.
Los amantes del mundo romano, tienen pendiente una visita en coche: Calatayud se halla muy cerca de la ciudad romana de Bilbilis, cuna del gran poeta Marcial. Se trata de un yacimiento arqueológico muy importante. Si no tienes tiempo puedes acercarte al museo de la ciudad, donde se exhiben piezas de interés.
Cómo llegar... y volver
Si terminas la ruta en Calatayud te aconsejamos desplazarte a Zaragoza, importante nudo de comunicaciones. Desde Calatayud puedes desplazarte a Zaragoza tanto en tren como en autobús.
- En tren, RENFE realiza el trayecto Calatayud - Zaragoza y Zaragoza - Calatayud todos los días de la semana. La frecuencia es muy amplia por lo que te aconsejamos llamar al 902 320 320 o consultar la página web www.renfe.com para concretar los horarios de esta línea. Si quieres conocer las condiciones para viajar con tu bicicleta consulta pinchando aquí la información que ofrece RENFE en su página web.
- En autobús, la compañía Automóviles Zaragoza también cubre el trayecto todos los días de la semana. Puedes consultar la página web www.automovileszaragoza.com o bien llamar al número de teléfono 976 219 320 para ampliar la información así como para consultar las paradas ya que además de en la Estación de Autobuses, la compañía realiza otras paradas en la capital zaragozana. Automóviles Zaragoza sí permite transportar bicicletas aunque establece un máximo de dos por cada trayecto. Exigen que la bicicleta vaya protegida con una bolsa específica para su transporte. La consideran equipaje por lo que no hay que pagar ningún coste adicional al billete ordinario del trayecto.
- Zaragoza cuenta con aeropuerto que ofrece varias conexiones nacionales e internacionales a lo largo de la semana. Para consultar los destinos y la frecuencia de vuelos te aconsejamos visitar la web del aeropuerto de Zaragoza pinchando aquí. Si quieres viajar con tu bicicleta cada compañía establece su normativa y tarifas para este transporte ya que no se trata de un equipaje con las medidas estándares y se suele cobrar aparte. Además requiere un embalaje especial. Hay vuelos en los que no se permiten facturar bicicletas. Contacta con tu compañía aérea antes de viajar.
Información práctica
- Ayuntamiento: Plaza Joaquín Costa, 14 (50300)
- Teléfono: 976 881 314 / 976 881 705
- Correo electrónico: calatayud@dpz.es
- Web: www.calatayud.es
- Habitantes: 19502
- Altitud: 536 m.