Las fantasmagóricas apariciones del Cid Campeador
Hay quien situará al Cid en el cielo el Día de Todos los Santos y quien lo ubicará en el Purgatorio el Día de Difuntos (del infierno, mejor ni hablamos). En cualquier caso, el temor a la muerte ha preocupado (y ocupado) al hombre desde la más remota antigüedad y en todo este embrollo de visitas a cementerios, flores, misas, eventos fúnebres varios (Covid aparte), el Campeador no iba a ser menos.
Hace ya algunos meses, el Dr. Alfonso Boix, medievalista e investigador especializado en el Cid, publicó en la revista Medievalia (Universidad Autónoma de México) un estudio sobre las leyendas “post mortem” del que en buena hora nació, algo que no deja de ser sorprendente ya que, mientras unos se limitan a estudiar solo las hazañas de Rodrigo en vida, otros, como Alfonso Boix, han decidido ampliar ese campo de estudio y rescatarlo del más allá.
Pero… ¿por qué este tipo de relatos? ¿Qué llevó al investigador a realizar esta recopilación y su posterior análisis?. El motivo es doble: por un lado, la revista Medievalia le propuso realizar un estudio sobre el Cid. En homenaje a la tierra azteca, de donde es originaria la publicación, y puesto que la invitación llegó a puertas de noviembre del pasado año, el autor pensó en vincular de algún modo al Cid con la festividad mexicana del Día de Muertos "ignoraba cómo dar semejante salto transatlántico", reconoce Boix. La respuesta le llegó gracias a su colaboración con el Consorcio Camino del Cid, entidad que lleva algo más de tres años trabajando en un ambicioso proyecto con el que pretende sacar a la luz todas las tradiciones cidianas existentes en las provincias que forman parte de la ruta. Esta iniciativa, que realiza en colaboración con el Proyecto del Plan Nacional de I+D "Magia, Épica e Historiografía Hispánicas: Relaciones Literarias y Nomológicas", adscrito a la Universidad de Zaragoza y dirigido por el catedrático Alberto Montaner, ha permitido la compilación y difusión de cerca de 60 leyendas sobre el Campeador asociadas a las provincias que integran el itinerario. Algunas de ellas protagonizadas por el Cid… más espectral.
Die Wilde Jagd ("La Chasse sauvage"). Johann Wilhelm Cordes
Este fue el punto de partida ya que esas leyendas dieron lugar al estudio "Literatura y folklore en las leyendas post mortem del Cid". Boix rescató cinco relatos: en uno de ellos, al Cid se le aparece su padre e hijo antes de morir, lo cual asocia con las actuales apariciones de parientes difuntos a personas a punto de fallecer; la más popular de todas cuenta cómo el Cid ganó una batalla después de muerto; también el Cid (más bien su fantasma) aparece cabalgando por el entorno del monasterio de Fresdelval en Quintanilla Vivar (Burgos) el Día de Difuntos. El estudio también recoge la leyenda del judío que intenta mesar la barba del Cid (ya cadáver) y éste se pega un susto de muerte (muy propio) “el judío me despierta cierta ternura, es como un niño que ha querido hacer una travesura y se ha llevado el susto de su vida”, subraya Boix que reconoce que es una de sus favoritas junto a la que narra cómo el Cid está al mando de un ejército de espectros junto a Fernán González. El investigador relaciona este relato con la Wilde Jagd y la Mesnie Hellequin así como con otros ejércitos de espectros del folklore europeo “son unos mitos que me fascinan, me gusta porque permite observar cómo esas tradiciones de origen pagano pervivían en España, aunque fuesen cristianizadas”.
El estudio puede consultarse a través de la Revista Medievalia (pinchar aquí para acceder) de la que, por cierto, desde hace pocas semanas, Alfonso Boix forma parte de su Comité Editorial. Quién sabe si en un futuro, se podrá ampliar el trabajo con nuevos textos. En este sentido, el medievalista es contundente: “seguro que quedan muchas leyendas del Cid fantasmales en textos antiguos, en nuestros pueblos… Estoy convencido de que quedan aún más joyas por descubrir, como seguro estoy de que el proyecto para la recuperación de leyendas del Camino del Cid logrará preservar algunas de ellas”, concluye Boix.