Tras la pista de... ¿las casas del Cid?
Imagen del Solar del Cid hacia finales del siglo XIX (Foto: Coleccin Asociacin Ego Ruderico)
Patricia Ansótegui
El 10 de julio es una fecha icónica para el mundo cidiano. No en vano es el día en el que para muchos investigadores murió Rodrigo Díaz, el Cid Campeador. A partir de ahora también es un momento clave para una de las últimas investigaciones que se están llevando a cabo en torno al de Vivar, y es que precisamente ese día y gracias al impulso de la Asociación Ego Ruderico, comenzaron las excavaciones en el Solar del Cid, lugar en el que según la tradición Rodrigo pudo tener una o varias propiedades. Aunque por el momento sólo se está llevando a cabo un sondeo (únicamente se ha abierto una zanja paralela al monumento erigido en el lugar) los resultados son evidentes. Varios silos y un muro “de entidad” han salido a la luz nada más romper el pavimento. Hablamos con la arqueóloga que está dirigiendo los trabajos, Fabiola Monzón y con Fernando Sánchez, historiador y miembro de la Asociación Ruderico.
Fabiola Monzón. Arqueóloga. Directora del proyecto de excavación del Solar del Cid, Burgos.
La arqueloga Fabiola Monzn, directora de las excavaciones- ¿Qué trabajos se están llevando a cabo?
Es un proyecto conjunto a los trabajos que se están desarrollando en la cercana Iglesia de San Román. Se trata de un sondeo de comprobación ya que no tendría sentido levantar toda la superficie si no hay nada. Siempre se trabaja así, primero planteas un sondeo, compruebas el potencial que tiene y se decide si es interesante continuar o no.
- El monumento que encontramos actualmente en el Solar del Cid data del año 1784. Sin embargo pudo haber uno anterior del que quizás las excavaciones arrojen algo de luz…
Sabemos que el monumento actual está desde esa fecha, también sabemos que se ha reformado el espacio de pavimentación. Todos los grabados y fotografías posteriores existentes muestran una explanada bien definida con una serie de pivotes que sí han podido variar a lo largo de los años. En el siglo XVI hay documentación que plantea la posibilidad de hacer un monumento pero no hay constancia de si finalmente se llegó a realizar o no. Existe la posibilidad de que encontremos restos que nos permitan asegurar que, efectivamente, hubo un monumento anterior al actual. Fray Francisco de Berganza y Arce (Padre Berganza) recoge en torno al año 1490 que en este lugar estaban las casas del Cid y que estaban arrendadas. Todos estos planteamientos los tenemos que hacer entendiendo cómo era la ciudad, tanto en el siglo del Cid (siglo XI) como en posteriores.
- ¿Y cómo era?
En el siglo XI Burgos era una ciudad muy pequeñita, muy vinculada al castillo, como una pequeña ciudadela que podría llegar a tener seis o siete hectáreas. Sería una ciudadela ancha, con su iglesia, su castillo y su muralla… Luego tendríamos barrios suburbanos al amparo de la ciudadela como el de San Martín, lugar en el que se encuentra el Solar del Cid. Posteriormente, y a partir del siglo XII la gente comienza a descender la ladera y a medida que lo va a haciendo va ocupando esas zonas del cerro.
- El barrio de San Martín y en concreto el lugar en el que se ubica el Solar del Cid pronto entra en decadencia…
Estamos hablando de una zona extrema. Piensa que la calle se llama Tenebregosa, el nombre te lo dice todo. Además llega un momento en el que la gente empieza a concentrarse alrededor de la catedral. Esta calle además está bastante alejada del Camino del Santiago, algo que también define toda esta zona. En el siglo XV existían unas casas supuestamente del Cid o de su linaje pero como te digo esta zona, en aquel momento, ya estaba muy degradada.
"El muro que hemos encontrado tiene entidad
y sabemos que es anterior
al monumento de 1784"
- Una vez comenzadas las excavaciones, los hallazgos son casi inmediatos...
Sí, en cuanto empezamos a levantar el hormigón apareció un muro inmediatamente lo que nos permite afirmar que en este lugar hubo construcciones. ¿De qué tipo son? Intentamos datarlo a través de la estratigrafía. Nosotros trabajamos por niveles de estratos. Toda esa sucesión es la que los arqueólogos analizamos. El material que encontramos en cada uno de los niveles nos ayudan a entender y contextualizar los diferentes elementos. Por ejemplo los silos que hemos encontrado sabemos que tenían una tipología específica. Para contextualizar el muro necesitaríamos abrir más extensión, esto nos permitiría conocer sus dimensiones, sus características, si tenía algún espacio aledaño como una huerta, un corral… El muro que hemos encontrado tiene entidad, no es un muro pequeño, tiene consistencia y sabemos que es anterior al monumento de 1784.
- ¿Se podría precisar algo más su datación? ¿podríamos situarlo en el siglo XI?
Por el momento sólo podemos afirmar que es anterior a la fecha que te he comentado aunque el silo que hemos encontrado sí nos sitúa en un contexto medieval.
- Partiendo de que es prácticamente imposible vincular los hallazgos a la figura del Cid, improbable que el muro encontrado pudiera formar parte de su vivienda y dejando al lado la visión científica de todos los trabajos... ¿Crees posible que el Cid pudiera tener aquí alguna propiedad?
Burgos es la ciudad y si damos por bueno que el Cid nació en Vivar es probable que tuviera algún vínculo con ella. Estamos en la época de Alfonso VI. Él cambia la ciudad y es quien inicia el desarrollo de Burgos, potencia el Camino de Santiago, trae la sede episcopal… Quizás le donó algún terreno. Al margen de sus diferencias, que además están dentro de un contexto histórico, Alfonso VI intenta atraer población por lo que pudo donarle alguna heredad y más siendo alguien de su entorno, de su confianza.
- Una vez finalizadas las excavaciones ¿cuáles son los pasos a seguir?
El Solar del Cid desgraciadamente, e incluso para los propios burgaleses, es un lugar que no se sabe dónde está. Sería interesante convertirlo en punto turístico, acondicionarlo y más aún cuando es lugar de paso de peregrinos del Camino de Santiago. Sobre si se va a continuar abriendo o si vamos a seguir con las excavaciones son decisiones que tienen que tomar las administraciones. En este caso hay interés por parte del Ayuntamiento de Burgos y también de la ciudadanía en sí. A lo mejor ahora se tapa y luego continuamos. Lo que está claro es que no puede estar mucho tiempo así.
Fernando Sánchez, miembro de la Asociación Ego Ruderico de Burgos
Fernando Snchez, de la Asociacin Ego RudericoLos trabajos arqueológicos dieron comienzo gracias a la iniciativa de la Asociación Ego Ruderico, colectivo radicado en Burgos que tras recopilar numerosa documentación sobre el Solar y su entorno, decidió impulsar la iniciativa para poner en valor la zona y el monumento erigido en el lugar en el que, según la tradición, el Cid pudo tener una o varias propiedades.
Según explica Fernando Sánchez, historiador y a su vez miembro de Ego Ruderico, antes de dar inicio al proyecto plantearon la propuesta a Javier Peña, catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Burgos así como al Ayuntamiento de la ciudad, propietario del Solar, y al Monasterio de San Pedro de Cardeña cuya comunidad, parece ser, ostentaba la titularidad del terreno.
- Nos movemos en el ámbito de las conjeturas…
Cuando analizamos toda la documentación parece ser que el propietario de las viviendas que había en el Solar era en origen el Monasterio de San Pedro de Cardeña. En torno al año 1200 en esa zona vivía gente de cierta alcurnia. Sin embargo, y a medida que van pasando los años, se crea lo que yo llamo “el otro Burgos”. La gente no quiere vivir en la parte alta de la ciudad y con la construcción de la catedral en 1221 el centro neurálgico comienza a desplazarse hacia abajo.
- Estos movimientos obligan al monasterio de San Pedro de Cardeña a plantearse qué hacer con las viviendas que había en el Solar del Cid…
Sí, San Pedro de Cardeña cada vez lo alquila a gente de más baja estofa hasta que llega un momento, y avanzado el siglo XVI, en el que Regimiento (así se denominaba al Ayuntamiento de la ciudad) lo ve muy mal, muy abandonado y dada la vinculación que tiene con el Cid, plantea que ahí hay que hacer algo. En 1593 el monasterio de San Pedro de Cardeña, al que no parece importarle demasiado deshacerse de ello aunque tiene claro que es una perita en dulce, llega a un acuerdo con el Ayuntamiento a través del cual éste se compromete a un pago de 600 maravedíes anuales, a no edificar en ese lugar y a levantar un monumento en el que aparezca el escudo de la ciudad, el de las armas del Cid pero también el del monasterio.
- Y ese monumento ¿llegó a construirse?
Entre 1593 y 1784, fecha del monumento actual, hay una pequeña etapa oscura. Es posible que hubiera otro monumento pero no tenemos ninguna constancia gráfica. Sin embargo es significativo que en el convenio de cesión la idea aparezca reflejada.
Esa “etapa oscura” se da por cerrada en 1784 cuando se construye el monumento que conocemos actualmente…
Sí, pero como suelo decir el monumento actual es producto de un pleito. Cuando 200 años después se proyecta ese segundo monumento los monjes se cogen un mosqueo importante porque no les tienen en cuenta. El Ayuntamiento ni sabía que era suyo. Los monjes los denuncian y ganan. Les exigen que pongan el escudo del monasterio y les paguen la anualidad que 200 años atrás se había acordado. Aún así no creo que el dinero llegara a pagarse nunca.
"Algo tenía que haber para que
en siete siglos nadie se haya
atrevido a poner el pie ahí"
- Me llama la atención que exista una documentación tan fidedigna en torno a este espacio…
Sí. Además es difícil encontrar un sitio que durante siete siglos ha estado incólume, no lo ha tocado nadie. Se hacen las casas, se derrumban y en siete siglos se convierte en un lugar sacrosanto. Cuando lees todo esto del pleito es curioso el cuidado que se tomaba tanto el Ayuntamiento como el Monasterio de San Pedro de Cardeña. ¿Por un terreno cualquiera, corriente y vulgar, por una parcela como hay 50.000 en Burgos?. No, algo tenían que saber, algo tenía que haber para que en siete siglos nadie se haya atrevido a poner el pie ahí y eso es lo que a mí me conmueve y lo que lo hace especial. Si con los trabajos que estamos llevando a cabo podemos datar algún hallazgo del siglo XI supondría una satisfacción total aunque es imposible afirmar que fuera la casa del Cid, hay que ser realista.
- También es curioso el interés tanto del Ayuntamiento como del Monasterio de San Pedro de Cardeña y más teniendo en cuenta el poco tiempo que estuvo el Cid en Burgos…
Sí y además las cosas importantes las hizo fuera (risas). Yo creo que si te sitúas en el año 1593 hay cierta mentalidad de oportunismo, me da esa sensación.
- Una vez finalizados estos trabajos ¿cuál es el siguiente paso de la Asociación Ego Ruderico?
Lo que se está realizando es un sondeo. Al poco de comenzar apareció ese muro. Yo estaba seguro al cien por cien de que íbamos a encontrar algo pero yo esperaba estructuras más livianas… Ese muro o es una parte de muralla o parte de una edificación regia. Lo que me pide el cuerpo es levantarlo todo. Por el momento hemos mapeado todo el solar, tomado más de 2.000 fotografías geolocalizadas de tal modo que lo vamos a reconstruir en 3D y produciremos un audiovisual con la mejor tecnología que se puede usar hoy en día. Me gustaría moverlo a nivel nacional o incluso en otros canales como National Geographic. En próximas fechas tendremos una reunión con el Ayuntamiento de Burgos en el que abordaremos qué hacer con los restos encontrados.