Pasar al contenido principal

El rey que caminaba desnudo

Alberto Luque Cortina

Un ao ms FITUR, la feria internacional de turismo de Madrid, ha cerrado sus puertas. Si algo positivo puede extraerse de la crisis que nos golpea es que esta nueva situacin obliga a replantear muchas cosas, a verlas desde otra perspectiva, y as parece estar ocurriendo con FITUR.

Para quien no hayan asistido nunca, les dir que FITUR eran en realidad dos ferias: la de negocios y la institucional; dos secciones divididas por una calle que ms pareca una frontera. A la derecha se encontraban las empresas privadas, grandes operadores, agencias, cadenas hoteleras, destinos en terceros pases... Acudan a visitar y agasajar a sus clientes y hacer nuevos contactos. A la izquierda se hallaban los stands institucionales, casi siempre territoriales: comunidades autnomas, patronatos provinciales de turismo, ayuntamientos, consorcios y fundaciones, algunos de los cuales (por supuesto no todos) acudan a la feria sin un objetivo claro, por lo que resultaba muy difcil medir la eficacia de una inversin a todas luces alta, gastos de representacin incluidos. Y aunque siempre estaban los medios de comunicacin locales, provinciales, o autonmicos, para difundir jubilosamente el xito ese ao de la participacin en la feria, casi todos eran conscientes de que la inversin no justificaba los resultados obtenidos (y esto cuando eran cuantificables); en definitiva, que se mirase como se mirase, y como nos cont Andersen en su cuento El traje nuevo del Emperador, el rey caminaba desnudo.

En 2013 hemos podido palpar un cambio progresivo de mentalidad: han acudido menos expositores, los stands tambin se ha reducido, pero ha habido ms negocio. La calle que divida la feria en dos es ahora, ms que otros aos, un puente de comunicacin: reuniones, ofertas, posibilidades. Quiz ste haya sido el ao en que el sector pblico se ha mezclado ms con la oferta privada, el ao en que muchos representantes polticos, algunos de primera fila, se han sentado a hablar, a escuchar propuestas, y tambin al revs. Esto es esperanzador.

Por nuestra parte este ao hemos enfocado FITUR con vistas a nuestra promocin exterior. Desde los inicios del Camino del Cid supimos que esta era una ruta destinada al pblico extranjero, pero tambin que sera un objetivo complicado de conseguir. Hemos realizado una larga travesa desde entonces, muchas veces en solitario, para llegar hasta donde hoy estamos. Queremos ofrecer productos atractivos, de calidad, que respondan a las expectativas de los actuales y futuros visitantes de fuera de nuestras fronteras. En este sentido pensamos que la presentacin en marzo de 2013 de las topoguas cicloturistas ser una nueva baza a nuestro favor.

De estas y otras cosas hemos estado hablando, gracias a la colaboracin del departamento de partenariado de la Fundacin Siglo, con los responsables de algunas oficinas de turismo espaolas en el extranjero y tambin con algunos turoperadores forneos. Las posibilidades son muy interesantes: el boletn especial del Camino del Cid lanzado por la OET de Mxico en enero es una prueba. En general, la recepcin del Camino del Cid ha sido excelente: nos ayudarn a darlo a conocer, confan en las posibilidades de este itinerario aunque la tarea, avisan, no va a ser fcil. Eso est bien, nos gustan los retos.

Si quieres leer otros Caminando, pincha aqu
Acompanos en Facebook y en Twitter

Compartir