Pasar al contenido principal

Ohtoño, la estación de las oportunidades

La ermita mozárabe de Barriosuso, en Santibáñez del Val, Burgos / ALC.

Alberto Luque Cortina

Vamos a ver: nos pasamos el mes de septiembre mirando al cielo para ver si la lluvia acaba de una vez con la sequía, pero el día que amanece nublado y comienzan a caer las primeras gotas, decimos: "Hace un día triste". Pues vaya.

El otoño es una estación propicia a este tipo de estereotipos: se asocia a la nostalgia, cuando no a la melancolía, y a veces a la depresión, y sin embargo el otoño es una maravillosa época de vida y actividad natural. Y también uno de los mejores momentos para salir al campo. Todo parece acentuarse: las sombras y relieves de los objetos, los colores, los olores... es sin duda la estación de las sensaciones.

En otoño el viaje parece más intenso


Es también un buen momento para recorrer el Camino del Cid. En otoño el viaje parece más intenso: es verdad que los días son más cortos y la climatología más diversa: algunas mañanas pueden ser muy frías o neblinosas para luego aparecer un sol radiante; o puede llover y chafarse alguna etapa (aunque no nos engañemos: desgraciadamente llueve menos de lo que nos gustaría).

Pero digo yo que todo eso forma parte del viaje, porque al final no nos acordamos de cuándo se construyó tal o cual iglesia, sino de las cuatro horas que estuvimos bajo su galería porticada esperando a que dejara de llover, o de las patatas con jabalí que nos comimos después. Nos acordamos de aquel color de fuego en las copas de los árboles que inútilmente quisimos copiar en nuestra cámara fotográfica, del ruido que hacía la rueda de nuestra bici al rodar sobre las hojas secas, del olor a leña al entrar en un pueblecito o de las cosas curiosas que nos contó aquel tipo que nos invitó a su casa y cuyo nombre hemos olvidado. Bueno, eso es viajar ¿no?

Villaseca de Henares, GuadalajaraVillaseca de Henares, Guadalajara

Esto suena bien, pero lo cierto es que muchos, por muy diferentes motivos, no podremos estar seis o siete días en ruta, aunque no por ello vamos a prescindir del otoño. Se nos ocurren muchas cosas que hacer en una escapada rápida, tanto en soledad como en familia: es la época de un buen número de frutos del bosque, como las moras y el escaramujo -con los que hacer mermeladas- o las endrinas -¿os apetece un pacharán casero?-; es el tiempo de las setas, la berrea, el espectáculo de los bosques caducifolios, los tonos ocres de los sembrados, los contrastes paisajísticos, los paseos por el bosque, los atardeceres encendidos de nubes, el olor a tierra mojada...

Dos folletos-guía, una aplicación turística
para móviles y ocho guías exclusivamente para cicloturistas
son algunas de nuestras próximas acciones


Para este Consorcio también es un momento de mucha actividad, ya con la vista en 2013: estamos terminando los nuevos folletos de La Conquista de Valencia y La Defensa del Sur: son casi 500 km de senderos y 800 km de rutas por carretera; queremos que sean herramientas muy atractivas y de mucha utilidad para el viajero; si tenéis los tres anteriores ya sabéis a qué me refiero.

También estamos en la fase de pruebas de una aplicación turística para teléfonos y otros dispositivos móviles, y trabajando en lo que pensamos será el bombazo del próximo año: las guías cicloturistas. Buena parte de nuestras rutas de carretera discurren por comarcales muy atractivas y de poco tráfico, así que estamos preparando ocho topoguías con su correspondiente información técnica -etapas, perfiles, tipos de arcén, estado del firme...- mapas muy manejables, tracks, etc. Son casi 2.000 km de rutas muy diferentes entre sí que, como siempre, estarán a vuestra disposición gratuitamente en nuestra/vuestra página web.

Con nuestros mejores deseos de un feliz Ohtoño, os esperamos caminando.

Compartir