Arte de la piedra en seco, La Iglesuela del Cid

Las provincias de Teruel y Castellón, junto a otras zonas rurales de España, cuentan con interesantes ejemplos de construcciones en piedra en seco, arte declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en noviembre de 2018.

El arte de la piedra en seco o arquitectura en seco es una técnica tradicional consistente en la fabricación de construcciones mediante el apilamiento de piedras sin usar otros materiales de construcción salvo tierra seca. La estabilidad de las estructuras se garantiza mediante la cuidadosa selección y colocación de las piedras.

Se trata de un tipo de estructuras que no dañan al medio ambiente y que son un ejemplo de relación equilibrada entre el ser humano y la naturaleza. Además, sirven en la prevención de desastres naturales, contribuyen a luchar contra la erosión y desertificación, mejoran la biodiversidad y permiten crear condiciones microclimáticas muy positivas para la actividad agrícola.

Más allá de estas consideraciones, para aquellos territorios en los que predominan este tipo de construcciones, el arte de la piedra en seco es además una importante seña de identidad.

En el Maestrazgo turolense el paisaje ofrece kilómetros de paredes de piedra seca. No obstante, las manifestaciones más singulares se encuentran en La Iglesuela del Cid. Destacan especialmente las casetas o chozos construidos sin argamasa y cubiertos con bóveda o falsa cúpula. Se trata de edificaciones en su mayor parte realizadas a finales del siglo XIX y la primera mitad del XX, sencillas pero de gran funcionalidad y vinculadas a la actividad agrícola o ganadera, especialmente a la trashumante. 

Rev. PAB: 30.01.19