Abanco (Soria)
Situado aproximadamente a mil metros de altitud, en las proximidades de la Sierra de Pela, Abanco formaba parte en la Alta Edad Media del sistema de vigilancia musulmán de atalayas. Aunque no consta que en el siglo XI existiera ya un poblamiento, sí existía una atalaya de sillarejo en el monte contiguo a la población, tradicionalmente conocido como de "la Atalaya", hoy lamentablemente sellada a unos 60 cm de altura por un vértice geodésico.
No existe documentación que determine en qué momento Abanco fue poblado o repoblado, lo cierto es que, desde el siglo XIII, una familia de apellido Martínez, que rindió buenos servicios militares a los reyes de Castilla, rigió los destinos de esta población, hasta que en 1529 quedó incorporada al recién creado Marquesado de Berlanga y aún continuó hasta la desaparición de la rama masculina, en 1750. Uno de sus miembros, Fernando Martínez del Exido, fue, como el Cid, alcaide de la fortaleza de Gormaz, en la que mantuvo una dura resistencia en 1528, durante la Guerra de las Comunidades, a favor de Carlos I. Precisamente de principio del siglo XVI (1504) son las sentencias que el tribunal de la Inquisición de la Diócesis de Sigüenza dicta contra dos vecinos, al uno por renegar de Dios y al otro por "haber bailado en bodas de judíos" y beber y comer en dicha boda.
Qué ver y hacer en Abanco
Si llegas a Abanco, sé bienvenido, porque nadie llega a Abanco por casualidad, y la visita es siempre más interesante de lo esperado. Situado entre trigales donde anida la codorniz y bosquejos de encinas, Abanco es un pueblo de contrastes; se trata de un núcleo pequeño, practicamente deshabitado. Sus reducidas dimensiones contrastan con la imponente iglesia de San Pedro Apóstol. De estilo barroco, se terminó de construir en 1713 bajo la dirección de Alonso Martínez de Ochoa, quien también realizó las obras de la casa - palacio, hoy restaurado y en manos privadas. La iglesia conserva en su interior una pila bautismal tardo-románica.
El viajero puede subir al cerro de la Atalaya, donde se adivinan los cimientos de la antigua torre de vigilancia musulmana y desde la cual, dicen, se ven en días claros las fortalezas de Atienza, Gormaz, y Berlanga, tres de los hitos legendarios del Camino del Cid.
Abanco tiene un solo habitante. El pueblo pertenece al municipio de Berlanga de Duero: www.berlangadeduero.es