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Joanna Mendyk: “El Cid puede ayudar psicológicamente a muchas personas”

Joanna Mendyk en Zaragoza, en cuya universidad es doctoranda en Historia Medieval

Joanna Mendyk en Zaragoza, en cuya universidad es doctoranda en Historia MedievalJoanna Mendyk en Zaragoza, en cuya universidad es doctoranda en Historia Medieval

Patricia Ansótegui

Joanna Mendyk (Cracovia, 1991) – graduada y máster en Historia - estudió también Filología Hispánica y edición. Hace unos años dejó su trabajo como editora de libros para volver al mundo académico y ocuparse de la materia cidiana. Actualmente es doctoranda en Historia Medieval en la Universidad de Zaragoza (en cotutela con la Universidad Jaguelónica de Cracovia) y está trabajando, bajo la dirección del catedrático Alberto Montaner, en una tesis doctoral que tiene como objetivo elaborar una metodología del uso de la literatura en investigación histórica, junto con un estudio del ethos caballeresco reflejado en el Cantar de mio Cid   

- El Festival Burgos Cidiano ha organizado, a través de la Asociación Jimena (Universidad Complutense de Madrid), un congreso de temática cidiana que llevaba por título “Traspasando Fronteras”. El epígrafe le viene como anillo al dedo. ¿De dónde surge su interés por el Cid?
Tuvo mucho que ver el azar. Cuando estaba en Secundaria empecé a interesarme por la historia de España… por el fútbol (risas). Era aficionada al Barça. Ahora puede parecer un tema trivial pero entonces teníamos un foro en el que, además de fútbol, hablábamos de otros asuntos relacionados con España. Más tarde elegí estudiar historia y tuve claro que debía ser historia de España. Me enamoré del periodo medieval tras escribir un ensayo sobre las Navas de Tolosa y más tarde, del Cid. Quería relacionar historia y literatura y mi directora del Trabajo de Fin de Máster y yo escogimos el Cantar. 

- Es el segundo año que participa en el Congreso. En esta edición ¿qué aspectos ha abordado?
He hablado sobre el ethos caballeresco pero reflejado en la épica y en el Cantar de mio Cid, algo muy relacionado con mi tesis doctoral y con un artículo que acabo de escribir y que se publicará en los Cuadernos de Historia de España, en Argentina.

- Parte de su trabajo trata de la faceta bélica del Cid del Cantar. ¿Cree que es una temática sobre la que aún no se ha profundizado lo suficiente? 
Sí, paradójicamente, y creo que todo tiene su origen en Menéndez Pidal. Él era filólogo a fin de cuentas y no experto en la historia militar. Por tanto, no le interesaba tanto la faceta militar del Cid, ni el histórico, ni el poético. La única persona que se ha ocupado de este aspecto de manera más detallada, antes de los estudios de David Porrinas y de los míos, ha sido Gárate Córdoba. Curiosamente mi trabajo va a ser el primero sobre la vertiente militar y bélica del protagonista del Cantar, tratado como modelo caballeresco.

- ¿Considera que aún es posible aportar algún dato nuevo sobre el Cid? ¿Y sobre el Poema? 
Después de los estudios de Alberto Montaner y del trabajo de David Porrinas sobre la faceta militar del Cid histórico es difícil. Pero sobre en el caso del Cantar, sin duda. En mi opinión, no se ha aprovechado lo suficiente, es una fuente fundamental para la historia de las mentalidades, para conocer a la gente que vivió en el tránsito del siglo XII al XIII. La historia de las mentalidades no ha sido muy popular en España y el Cantar puede dar una visión muy interesante de los ideales, de la vida cotidiana e, incluso, de la guerra.

"El Cid era capaz de llevar a cabo cualquier proyecto.
Hay mucha gente que puede sentirse identificada con él" 

 

- La línea entre el Cid histórico y el Cid literario es muy fina ¿Qué opinión le merece el personaje histórico y que visión tiene sobre el Cid de leyenda?
Es una pregunta muy compleja. Yo creo que el Cid histórico fue un hombre muy exitoso en lo que hacía, en la guerra y, cuando era más maduro, también en la política. Tuvo grandes habilidades y supo rodearse, reunir y construir una gran mesnada como caudillo independiente, algo que también encontramos, por ejemplo, en Geraldo Sempavor, llamado el Cid portugués. Creo que el Cid era puro pragmatismo y por eso se sentía perfectamente tanto en la Taifa de Zaragoza como luego en Valencia, quizás en Castilla no tanto (risas). Era muy eficaz, un híbrido entre dos mundos, el cristiano y el musulmán. Era capaz de llevar a cabo cualquier proyecto y de convencer a los suyos para que se sumaran a ese proyecto. 

Con el Cid legendario la situación es mucho más compleja, en cada época el personaje ha sido (y sigue siendo) reinterpretado de acuerdo con la mentalidad vigente. El Cid del Cantar comparte con el histórico las capacidades bélicas y, hasta cierto punto, el pragmatismo, pero todo ello va acompañado de matices éticos, ante todo la mesura y la lealtad hacia el rey.  Pienso que hay mucha gente que puede sentirse identificada con él (o inspirada por él), a fin de cuentas es un personaje que lo perdió todo y que tuvo que reconstruir su identidad, su honra pública y su mesnada, tuvo que hacer riqueza y superar un conjunto de pruebas. Creo que el Cid puede ayudar psicológicamente a muchas personas a superar retos o incluso enfrentarse a enemigos que intentan destruirles la vida aunque siempre según el Cantar, obviamente.  

Un momento de la entrevista en el Monasterio de San Agustn de Burgos, sede del Consorcio Camino del CidUn momento de la entrevista en el Monasterio de San Agustn de Burgos, sede del Consorcio Camino del Cid

- ¿Es difícil para un historiador tener una visión objetiva sobre el Cid?  
Sí, especialmente cuando nos referimos a la Edad Media. La guerra en este periodo es fundamental, es un elemento regular y más en la península medieval. Personalmente me costó leer las fuentes árabes sobre el Cid histórico que narran que los habitantes de Valencia asediados tenían que comer ratas o sus propios caballos o que el Cid quemaba a la gente que intentaba escapar de Valencia. Obviamente, es probable que los cronistas musulmanes exagerasen la crueldad del Cid, pero por otro lado sabemos que la guerra era así. Es complicado no emitir juicios de valor, pero siempre hay que recordar que la tarea del historiador es analizar el pasado y no juzgarlo. A fin de cuentas yo no me puedo poner en la situación de la gente que vivió en la Edad Media, con mi posición no puedo entenderlo. No se puede juzgar al Cid con las reglas actuales. 

- En próximas fechas va a salir a la luz su libro “Dwie twarze bohatera: Rodrigo Díaz a jego wizerunek w «Pieśni o Cydzie»” (“Dos caras del héroe: Rodrigo Díaz y su imagen en el «Cantar de mio Cid»”) ¿Qué temas trata en el libro?
Básicamente todos (risas), es un libro bastante extenso.

- Va a ser el primer libro sobre el Cid que se va a publicar en Polonia…
Existe algún artículo pero este va a ser el primero que va a estar dedicado íntegramente tanto al Cid histórico como al Cid del Cantar. El libro, en el que comparo a ambos, consta de cuatro partes, la primera trata las fuentes, la segunda ofrece una biografía del Cantar acompañada con un trasfondo histórico dirigido al público polaco, en la tercera ofrezco un análisis del Cid del Cantar de acuerdo con cinco claves: la guerra, la política, la religión, la familia y la honra y en la cuarta y última parte abordo los roles del Cid del Cantar y qué tiene en común con el Cid histórico. Intento comprender ambos personajes en sus contextos. 

 

"El Cantar es una fuente perfecta
para conocer la mentalidad de la caballería" 

  

- ¿Cree que en España se conoce suficientemente al Cid?
El Cid histórico es conocido como un gran guerrero pero cuando comencé el doctorado en España  me sorprendió que los historiadores medievalistas no conocían al detalle el Cantar, es una fuente perfecta para conocer la mentalidad de la caballería.  

- ¿Por qué escogió la Universidad de Zaragoza?
Por Alberto (en alusión al catedrático, Alberto Montaner).

- ¿Considera que una ruta como el Camino del Cid puede ayudar a conocer al personaje?
Sí, porque puede motivar a la gente a conocer tanto al Cid histórico como al Cid del Cantar. Hace un par de semanas una amiga polaca que vive en España me preguntó por alguna edición del Cantar ya que tiene previsto recorrer algún tramo del Camino del Cid. La mera naturaleza del proyecto te hace interesarte más sobre el tema. 

- Y entre Cid del Cantar y Rodrigo Díaz, el hombre de carne y hueso ¿con cuál se queda Joanna Mendyk?
Me atraen cualidades de ambos y me puedo identificar con los dos pero más bien con el Cid del Cantar. 

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