Ana Guarinos: El Camino del Cid es un reclamo de primera magnitud para favorecer el desarrollo de nuestros pueblos

 

Para mí, y para la Institución que me honro en presidir, es un gran honor asumir este reto. Es una responsabilidad que afronto con gran ilusión y con ganas de trabajar para impulsar una iniciativa que en sí misma ya supone un gran reto, teniendo en cuenta la gran diversidad de los territorios por los que atraviesa el Camino del Cid, su largo recorrido -con más de 2.000 kilómetros- - y las enormes posibilidades de desarrollo que supone para las provincias implicadas en la iniciativa. Yo espero estar a la altura de este gran proyecto y del resto de diputaciones que han ido asumiendo esta tarea, trabajando codo con codo para mantener esa colaboración necesaria e imprescindible para que el Camino se siga fortaleciendo.

 

Creo que no sólo es un valor añadido, sino un hecho fundamental. El Camino del Cid es una iniciativa que durante estos años ha sabido mantener la unión en torno a una figura única y universal: el Cid Campeador, aunque, curiosamente, los territorios que hoy se unen por el Cantar de Mío Cid como una iniciativa de marcado carácter turístico y cultural, en la época de Rodrigo Díaz de Vivar vivieron duros enfrentamientos, siendo el Cid protagonista de mil batallas, entre ellas, la guerra que enfrentó a Sancho II de Castilla con su hermano Alfonso VI de León, quien finalmente se haría con el trono de Castilla y León. Castilla y León, hoy dos territorios unidos en una misma Comunidad Autónoma y ligados también, esperemos que de forma definitiva, a las tierras de Aragón, Valencia y Castilla-La Mancha merced a un bonito y esperanzador proyecto común. El Camino del Cid es una iniciativa que nace de territorios muy distintos, con problemáticas diferentes y necesidades muy dispares, pero que ha sido un motivo de unidad en torno a la idea de potenciar la riqueza histórica, cultural y monumental basada en una figura de leyenda que nos ha unido a todas las diputaciones. Creo que no hay marcha atrás. Estamos obligados y comprometidos a continuar en esta tarea, que está reportando enormes beneficios a los ciudadanos de las provincias que integran la ruta del Camino del Cid.

 

Comparado con otros itinerarios tradicionales, con una larga historia a sus espaldas, esta iniciativa es aún muy reciente y, por tanto, necesita de tiempo y mucho esfuerzo para alcanzar la madurez necesaria hasta que se convierta en una ruta conocida en todo el mundo. Pero estamos en ello, y tanto el personaje que nos sirve de guía como los territorios por los que discurre su ?aventura histórica? son sobradamente importantes como para alcanzar la meta con éxito. Por eso, porque creemos en ellos, estamos haciendo un gran esfuerzo, a pesar de los recursos limitados con los que contamos y de la dificultad que supone crear una ruta desde la nada, sin embargo, todos nosotros: las diputaciones provinciales, los municipios, los ciudadanos de esos pueblos en los que el Cid dejó su huella, estamos totalmente implicados y somos conscientes de que, unidos y trabajando en la misma dirección, el Camino, que ya es una ruta de referencia cultural e histórica, saldrá formalizado con el impulso de todos y reportará grandes beneficios a todos los pueblos de su recorrido. Las aspiraciones son grandes, y también las ganas de conseguirlo. Además, las nuevas tecnologías, las nuevas formas de comunicación e información, las redes sociales y su carácter universal se convierten, sin duda, en el mejor aliado para terminar con éxito el camino que acabamos de empezar a andar.

 

El Cid Campeador es un personaje de gran significado en la historia remota de este país que, a pesar el paso del tiempo, se mantiene vivo en la memoria colectiva. Fue un guerrero, y un gran luchador que dejó su huella en todos aquellos territorios que fueron testigo de sus batallas. La provincia de Guadalajara, por supuesto, que no es ajena al paso de aquel Campeador del siglo XI.

Guadalajara es una provincia castellana ligada desde siempre a la figura del Cid. El Campeador es un personaje consustancial a esta tierra castellana, de hecho existen parajes y castillos conocidos como del Cid, enclaves que recuerdan desde hace siglos su paso por estas tierras en sus andanzas entre Castilla y Levante. Territorios como el valle del Henares, Sigüenza o Molina de Aragón están estrechamente relacionados con el personaje histórico y lo sentimos como propio.

No hay que olvidar que el Camino del Cid recorre cerca de 300 kilómetros en nuestra provincia, pasando por 36 municipios y 15 pedanías. En todos y cada uno de ellos, pero especialmente en aquellos que desconocían su protagonismo histórico ligado a Rodrigo Díaz de Vivar, el establecimiento de esta ruta ha hecho que la figura del Cid se convierta en parte indiscutible de su pasado y de su presente. Algunos incluso han descubierto al personaje histórico merced a este camino que pretende unir turismo, cultura e historia.

 

La Diputación de Guadalajara, consciente de la importancia que tiene esta ruta cidiana como destino turístico de primer orden, trabaja en la puesta en valor y la promoción de este relevante recorrido turístico-cultural a través de los atractivos e importantes recursos histórico-artísticos, medioambientales, folclóricos y gastronómicos de las distintas zonas y localidades de nuestra provincia que atraviesa el Camino del Cid.

Estamos apostando con determinación, y mucho esfuerzo económico y personal, por el turismo, como uno de los sectores que más pueden favorecer el desarrollo del medio rural, y por eso creo con absoluta franqueza que ésta ruta, por la trascendencia e importancia histórica del Cid, es un reclamo de primera magnitud para favorecer el desarrollo de nuestros pueblos.

 

Yo confío en que, como el propio recorrido que atraviesa el Camino del Cid, también el futuro de este proyecto sea largo y duradero. Confío plenamente en las posibilidades de esta iniciativa, y en que tiene por delante un futuro prometedor. No hay que olvidar que el hilo conductor de este Camino es una figura histórica de gran fuerza, tanta fuerza que, después de cientos de años, ha conseguido superar todas las barreras. Finalmente, quiero destacar lo importante que es contar con la unidad de ocho diputaciones provinciales, de ocho provincias y cuatro comunidades autónomas distintas. Esa unión nos da una fuerza extraordinaria en apoyo de nuestros respectivos territorios y de sus poblaciones. Desde la unidad de acción y la responsabilidad que a todos nos obliga en beneficio de nuestro país.

Yo confío en que el Consorcio y la apuesta fuerte que estamos haciendo las diputaciones de Burgos, Soria, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia, Alicante y Guadalajara, obtenga buenos resultados.

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