Andrea Bronston: Dedicar una película al Cid fue una idea excepcional

Patricia Ansótegui

Aún no había nacido cuando su padre empezó a forjar la idea de rodar una película sobre el Cid y todavía no había cumplido los dos años cuando comenzó a filmarse. Sin embargo Andrea Bronston recuerda cómo Charlton Heston moría "una y otra vez" y lo que lloraba Sophia Loren cada vez que rodaba esa escena. La hija de Samuel Bronston nos habla de su padre, de lo que le atrajo de España y de una película que, en su opinión, fue una de las decisiones más inteligentes y acertadas tomadas por el carismático productor. Una persona que, tal y como afirma, "era capaz de vender hielo a los esquimales"

- Eras muy pequeña cuando se rodó la película de El Cid ¿guardas algún recuerdo?
Sí, además también lo comenté en el libro que se ha publicado recientemente con motivo de la celebración de los 50 años del estreno. Tendría dos años o un año y medio. Recuerdo que mi madre me llevó al rodaje. Yo estaba en la parte de arriba, en la zona de las tramoyas, sentada encima de ella y yo miraba hacia abajo. En ese momento estaban filmando la muerte del Cid y veía a Sophia Loren que lloraba y lloraba... mi madre me preguntó que por qué lloraba yo y yo le decía que porque la señora de abajo estaba llorando mucho y el señor se había muerto varias veces ya (risas). ¡No entendía nada!.

- La película es una de las grandes producciones que nos ha dado el cine épico y, además, supuso un impulso económico muy importante para España...
Sí, ya que se hizo sobretodo en exteriores. A día de hoy sigo encontrándome con gente que se acerca y me dice: "yo estuve allí, y allí trabajé".

Curiosamente una parte importante de las personas a las que hemos entrevistado para que nos hablaran de la película conocen a alguien que figuró como extra en El Cid...
¿Sí? (risas), ¡hombre, habiendo 7.000 o 9.000 personas da para que entre cualquiera!.

                                                   " Mi padre era un ser muy especial
                                                 capaz de vender hielo a los esquimales"


- Por otro lado, la apuesta que hizo tu padre con España permitió traer repartos impensables, actores que, de otra manera, jamás hubieran pisado nuestro país
Es posible pero mi padre era un ser muy especial capaz de vender hielo a los esquimales. Si él quería algo, lo conseguía.

- Se han dicho muchas cosas acerca de tu padre, sin embargo las generaciones jóvenes no lo conocen...
No, tienes razón.

- Muchas personas han hablado de Samuel Bronston, de su carácter, de sus métodos de trabajo pero.. ¿qué nos puede decir Andrea Bronston de su padre, cómo era él?
¡Qué quieres que te diga yo!, era súper especial, para mí era lo más. Era pequeñito, gordito, con una sonrisa y unos ojos enormes. Era muy agradable con todo el mundo aunque tenía un genio de mil demonios pero con razón. Era súper inteligente y muy convincente con la gente, con lo que quería hacer y con lo que quería vender, era muy comunicativo.

- ¿Crees que se le ha hecho justicia en España?
Es un tema delicado. Puede que en algunas ocasiones sí y en otras no pero en general creo que se le ha tratado bastante bien en este país. Por ejemplo aquí en Las Rozas, en Madrid, (lugar en el que vive Andrea) está enterrado y hay una calle que lleva su nombre, también se le han hecho bastantes homenajes pero me gustaría que la gente joven le conociera también. No obstante, en general, creo que hay una buena imagen de mi padre.

- Lo que es cierto es que llegó a implantar una pequeña delegación de Hollywood en España...
Sí. Él tenía unos sueños y unas imágenes que, quizás, estaban fuera de lugar en aquel momento pero tenía una imaginación maravillosa y todo lo que se proponía prácticamente lo conseguía.

- ¿Por qué decidió venir a España, que le atrajo de este país?
Probablemente por la libertad que no tenía en EE.UU.

- España en aquella época no gozaba precisamente de libertades...
Él pensó que era un país pequeñito en el que había de todo: desiertos, mar, nieve, castillos... todo en el mismo país sin tener que irte de un lado a otro. Él lo tenía clarísimo, fue una visión y no se equivocó.

- Recientemente tuve la oportunidad de entrevistar a Sara Montiel. Según me dijo, la idea de rodar la película El Cid fue suya. Independientemente de esta afirmación - que cada cual la valore libremente - ¿qué opinión tienes acerca de que se decidiera hacer una película dedicada al Cid?
Me parece una idea excepcional ya que así todo el mundo sabe quién fue el maravilloso Rodrigo Díaz de Vivar. A mi padre le fascinaban los personajes históricos ya que pensaba que eran personas que habían influido en el país y en todo lo que ocurría a su alrededor. Pienso que fue una buenísima elección y, además, una elección muy inteligente: si estas trabajando en un país que no es el tuyo y te están ayudando en tu trabajo qué menos que homenajear a alguien muy importante de ese país.

- Uno de los personajes históricos que admiraba tu padre era Isabel la Católica. Sin embargo no pudo hacer una película inspirada en ella ¿crees que se le quedó clavada esa espinita?
Mi padre murió con Alzheimer por lo que muchas espinas no le debieron de quedar porque se le fue la memoria. Yo ya tenía una edad respetable cuando él quiso montar esa película y lo recuerdo perfectamente porque a mí me iba a dar un papel. Luego todo se torció... mientras era consciente sí le quedaba la espinita pero cuando ya el Alzheimer hizo presa de él no le quedó espinita ninguna

- De todas las películas que hizo en España ¿de cuál crees que se sentía más orgulloso?
La verdad es que no lo sé pero sí sé que El Cid fue muy importante para él.

- ¿Y su hija con cuál se queda?
Con El Cid y 55 días en Pekín, son las que más me gustan.

- Aunque ya nos has comentado que la escena de la muerte del Campeador la recuerdas a la perfección ¿destacarías alguna otra?
A mi me gusta muchísimo - además aprendí a tocar al piano la canción que sonaba en ese momento- la noche de bodas, los dos enfadados, cada uno en un lado de la mesa... me impresionó muchísimo y esa escena me gusta, me parece que tiene una tensión muy especial.

- Estamos a punto de concluir una iniciativa que hemos puesto en marcha en Facebook en la que preguntamos a nuestro seguidores a qué actores elegirían si se decidiese hacer un remake de la película. Para ti, ¿qué nombres podrían ser el nuevo Rodrigo y la nueva Jimena?
Me gusta mucho Pilar López de Ayala pero yo no pondría a Russel Crowe para interpretar al Cid.

- ¿Y por quién apuestas?
Por Clive Owen, me gusta más. Para empezar Russel Crowe es más bajito y Clive Owen tiene un saber estar muy regio, lo veo muy bien para el papel.

- También hemos preguntado por el director más idóneo para dirigir la película. Ridley Scott va ganando por goleada pero también Amenábar ha tenido muchos votos ¿a qué director nos propondrías tú?
Mira... Amenábar... no se me había ocurrido... me parece una elección estupenda. Ridley Scott a nivel internacional destacaría, sin duda ninguna, pero Amenábar tiene mucha categoría y una gran visión de las cosas.

- Algunas de las personas con las que hemos hablado nos han dicho que mejor que un remake de la película, quizás habría que hacer una nueva película sobre el Cid ¿qué ves más factible?
Yo también estoy de acuerdo en que segundas partes nunca fueron buenas, es mejor hacer una cosa nueva. En su momento la que hizo mi padre estaba fenomenal pero hoy en día con la tecnología que hay quizás sería más apropiado hacer una nueva película.

- A raíz de la película, muchas personas se ponen en contacto con nosotros, con el Consorcio Camino del Cid, con la intención de recorrer la ruta. Curiosamente, muchos de ellos nos confiesan que conocen al personaje por la película de tu padre y por... Charlton Heston
Cuando lees el Cantar de mío Cid piensas que el Cid podía ser bajito, calvito... es estupendo que el Cid haya sido inmortalizado con esa imagen.