Hacen falta #MásJimenas
Alberto Luque Cortina
La intro
A veces, como en El Padrino, te hacen ofertas que no puedes rechazar. A nosotros nos ocurrió con el Club Baloncesto Babieca. Se trata de un club de baloncesto femenino de la ciudad de Burgos, al que pertenecen unas doscientas cincuenta chicas que juegan en diferentes categorías y competiciones.
El CB Babieca es uno de esos clubes mal llamados modestos. Y digo “mal llamados” porque el 15 de octubre de 2024 cumplirá 20 años de existencia, y esto no es nada fácil. Seguro que algunos de vosotros sabéis lo que significa: preocupaciones, mucho papeleo, ir de puerta en puerta para conseguir alguna ayuda económica, tener tu teléfono operativo las 24 horas, madrugones los fines de semana y… muchas alegrías.
En este sentido, el CB Babieca es muy representativo de esos cientos de clubes de nuestro país cuyo único objetivo es que los chicos y las chicas se enganchen al deporte y hagan suyos una serie de valores que les haga mejores personas y, con toda probabilidad, más felices.
El presidente
Volviendo al asunto: el 2 de noviembre de 2022 apareció por nuestra oficina el presidente del club, Jorge Villegas para plantear la posibilidad de encontrar fórmulas de colaboración entre el consorcio y el club. “No vengo a pediros dinero”, dijo nada más entrar. Eso, de partida, relaja bastante.
Jorge nos explicó la trayectoria del club y sus inquietudes. Lo que más nos gustó fue su compromiso y su entusiasmo contagioso. Jorge fundó el Club con otros amigos hacía 19 años, pero parecía que acababan de registrarse esa misma mañana en la Federación. El reto estaba en cómo podíamos vincular ambos proyectos de una forma natural. La cosa fue muy fácil (para los más despistados, aclaro que Babieca es el nombre del legendario caballo del Cid).
Los valores
El Cantar de mío Cid es la espina dorsal de nuestro itinerario. Este poema épico de finales del siglo XII narra cómo el Cid y sus compañeros consiguen superar todas las adversidades gracias a su tesón, su inteligencia, y una fe inquebrantable en sí mismos y en sus posibilidades.
Aunque parece que todo el protagonismo se lo lleva el personaje de Rodrigo, lo cierto es que el Cantar es un poema coral: sus compañeros no son segundones, sino que tienen papeles decisivos en la trama: basta pensar, por ejemplo, en Álvar Fáñez o Martín Antolínez: sin su intervención, el desenlace habría sido otro. Juntos, forman un equipo imparable.
La analogía con el deporte es muy clara, así que nos pusimos a buscar en los versos del Cantar aquellos valores que destila la narración susceptibles de ser aplicados al deporte, todo ello con el aval del catedrático Alberto Montaner, el mayor experto mundial en el poema. El reto era muy bonito: ¿Qué enseñanzas podían ofrecernos un grupo de desterrados del siglo XI que sirvieran a deportistas del XXI?
El resultado fueron ocho valores, y podían haber sido más: orgullo de pertenencia, autocontrol, compañerismo, generosidad, amistad, estrategia, superación, y esfuerzo; todos ellos vinculados narrativamente a ocho localidades del Camino del Cid (Vivar de Cid, San Esteban de Gormaz, Ateca, El Poyo del Cid, Molina de Aragón, Morella, Valencia y Orihuela). Si quieres conocer más sobre esa relación pincha aquí para descargarte el folleto explicativo en pdf.
Y esta es la razón por la que, durante los próximos tres años, un modesto club de baloncesto femenino burgalés llevará en el frontal de la camiseta un mapa con los nombres de poblaciones de otras siete provincias, demostrando una vez más que ni la literatura ni el deporte requieren precisamente de fronteras.
Mapa de valores de la camiseta del CB Babieca.
#MásJimenas
La cosa no acaba aquí. Desde el primer momento Jorge expuso sus inquietudes y los objetivos del club, en los que trabajan desde su fundación: formar más jugadoras, conseguir una mayor repercusión del deporte femenino y aumentar la presencia de la mujer en el deporte, no sólo como mejora de hábitos saludables, sino como herramienta de integración y eliminación de barreras y desigualdades sociales.
Esta es una cuestión muy importante también para nosotros, como consorcio. Por un lado, somos conscientes de la importancia del incremento paulatino en nuestra ruta de mujeres cicloturistas (la serie documental de 13 capítulos que hemos hecho sobre “El Camino del Cid”, emitida este año por TVE y protagonizada por Ainara Hernando, es una de sus consecuencias). Por otro lado, la nuestra es una ruta que atraviesa principalmente espacios rurales muy poco poblados. Es en nuestros pequeños pueblos donde el papel decisivo de la mujer se visualiza con absoluta nitidez.
Sin embargo, el papel de la mujer ha sido opacado históricamente. El caso de Jimena no es una excepción. Muy poca gente sabe, por ejemplo, que tras la muerte de Rodrigo, Jimena lideró en solitario la defensa de Valencia durante tres años frente a la presión almorávide. Así que nos pusimos reivindicativos y le pedimos a nuestro diseñador, Julián de Velasco, que desmontara (temporalmente) al Cid de la conocida estatua ecuestre de Burgos, y montara en su lugar, a Jimena.
Y esta es la razón por la que, durante los próximos tres años, las jugadoras exhibirán, en la espalda de su equipación, a Jimena montada sobre Babieca, nada más lógico considerando el nombre del club. Esta imagen y el hashtag #MásJimenas son el lema de una campaña del club para difundir el baloncesto femenino, y que incluye un programa de becas para jugadoras sin recursos económicos, jornadas interprovinciales de convivencia, galas deportivas, entre otras acciones.
Final fake
La presentación de este proyecto, el pasado 4 de octubre, no fue el final de nuestra colaboración sino más bien el principio, porque está claro que hacen falta #MásJimenas. Quedan por delante muchos partidos por jugar, de los que os iremos dando cuenta. En fin, nos vemos, como siempre, Caminando.